Un mensaje o campaña de comunicación donde el usuario sienta que su intimidad está siendo invadida y que la marca insinúe conocer la localización u otros datos, puede provocar un sentimiento de inquietud.
El objetivo principal de las marcas siempre fue posicionar sus productos lo más cerca posible de la atención de los consumidores, y dentro de este objetivo poder ofrecer la mayor información posible ligada a una oferta que potencie la venta. Los esfuerzos de comunicación se centraron allí donde los consumidores tienen mayor concentración o tránsito. Atendiendo al lugar o medio, las formas de comunicar fueron evolucionando. De esta manera podemos decir que hoy en día, y gracias a las nuevas tecnologías, la evolución lógica ha terminado por crear soluciones que posibilitan anunciar y comunicar directamente allí donde se encuentra el consumidor.
El uso de dispositivos móviles en todo tipo de situaciones y lugares continúa en aumento. Cada vez son más los usuarios que viajan y usan sus smartphones o tablets en todo momento para consultar, compartir y almacenar toda la información de cuanto acontece. Los dispositivos de última generación, continuamente conectados a internet, son las herramientas más usadas actualmente.
Las pantallas de los dispositivos se han convertido en los mejores soportes publicitarios en toda y cada una de sus vertientes. Las marcas pueden acercarse a los usuarios a través de las redes sociales permitiendo conocer de primera mano las necesidades y opiniones reales de sus clientes. Otra manera de convencer empieza por ofrecer información útil, servicios, descuentos o simplemente entreteniendo por medio de Apps.
La última y más innovadora forma de comunicar está basada en el marketing de proximidad a través de los dispositivos móviles, que como principal ventaja a destacar para las marcas es el saber la ubicación del usuario. La cantidad de datos arrojados por un dispositivo conectado a internet son elevados, pero uno de los más relevantes es el geoposicionamiento en el justo momento en el que se desea comunicar, pues puede cambiar por completo la forma de acercarse al usuario. También la franja horaria influirá de forma determinante ya que las necesidades y el perfil del consumidor van cambiando durante el transcurso del día. Cualquier cambio que afecte en el entorno puede condicionar la forma de consumir, por eso, además de la ubicación se deben de tener en cuenta factores como las fechas claves, festividades, estacionalidad, etc.
Reducir la inquietud
Las nuevas tecnologías permiten conectar con los usuarios, pero una mala estrategia de comunicación puede dar como resultado una experiencia negativa y molesta. El simple hecho de sentirse identificado o que se sepa dónde se encuentra puede revertir en un sentimiento de inquietud y finalmente rechazo hacia la propia marca.
La mejor manera de minimizar una situación de inquietud es ofrecer la posibilidad de dar el control al usuario, dejar a su elección la opción de recibir mensajes o notificaciones. A esto hay que sumar realizar un mayor esfuerzo en cómo y qué se comunica.
Un mensaje o campaña de comunicación poco madurada donde el usuario sienta que su intimidad está siendo invadida y que la marca demuestre conocer sobre acciones pasadas, gustos, localización, edad, género, etc, puede provocar un sentimiento de inquietud y rechazo.
Sin embargo, el marketing de proximidad o geolocalizado, bien gestionado y que se adapte a las necesidades reales del usuario, puede generar positividad y grandes respuestas.
Una comunicación con gran valor de contenido
Aprovechar los datos en tiempo real para ofrecer la información de utilidad hará que los usuarios consuman en función de sus necesidades reales. Posibilitar el aumento de la venta en el lugar de destino es el reto. Los consumidores usan cada vez más sus dispositivos en el punto de venta y lugares de destino para consultar y elegir que hacer o consumir en función de sus necesidades en ese justo momento. Partiendo de este escenario, las marcas deben optimizar sus herramientas de comunicación para ofrecer sus productos y comunicar de manera eficiente.
WiFi Marketing, el retorno de la inversión
El servicio WiFi es uno de los más demandados en los establecimientos hoteleros, y se ha posicionado como un «amenity» indispensable que los clientes saben valorar. Las marcas y los establecimientos deben propiciar que el servicio sea de la mayor calidad posible y que garantice la seguridad de los usuarios conectados. Todos los viajeros necesitan conservar sus consumos de datos, sobre todo en el extranjero y conectarse a redes WiFi, para poder seguir interactuando con sus dispositivos.
Un servicio de conexión al WiFi gratis para los clientes conlleva gastos hacia el establecimiento, al igual que otros servicios que se dan por hecho que deben de ser ofrecidos y que de lo contrario causarían una mala reputación, como por ejemplo: limpieza, buena atención, agua caliente, jabón en los baños, jardines cuidados…
¿Cuál debería ser entonces la moneda de cambio para dar un servicio gratis? Utilizar la conexión WiFi como un canal de comunicación es posible, las marcas son cada vez mas conscientes del valor del servicio WiFi y de las innumerables posibilidades de interactuar con los clientes y usuarios conectados. Las herramientas que posibilitan acciones de WiFi Marketing no suponen una inversión elevada y permiten a las marcas acercarse a su audiencia de forma personalizada, sabiendo que el valor del dato será lo más importante, esto potenciará las ventas y la fidelización de clientes satisfechos del servicio.